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martes, 22 de septiembre de 2015

Mons. Oscar Andres Card. Rodriguez, invitando a que nos conozcas en las redes sociales

Monseñor Juan José Pindea, invitando a seguirnos en nuestras redes sociales

Mons. Guido Charvoneaux

Bienvenido (a)


Bienvenido a la página web del seminario 
SMNSS 

Como un medio para que conozcas nuestros proyectos, nuestra historia, nuestros sueños, y muchas cosas mas.

El Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa en su deseo de responder a las necesidades que surgen en esta época de innovación tecnológica, pone a disposición algunos espacios en la web donde se plasma de forma digital todas las actividades que realizamos en nuestro seminario de forma tal que esto pueda servir de apoyo para toda su comunidad formativa,  a las pastorales vocacionales de todas las diócesis hondureñas y en general a todas las personas que necesiten información acerca de esta magna obra de formación para la vida presbíteral  Son muchos los objetivos que perseguimos con esta proyección de nuestro seminario en la web, entre los principales objetivos encontramos los siguientes: 

1. ¿Que es el Semimario Mayor? ¿Que puedo hacer para iniciar el proceso de discernimiento? ¿Cual es el pesum de formación del Seminario Mayor? ¿A quien puedo contactar en mi diócesis para iniciar un proceso de discernimiento?, estas y muchas preguntas son las que se formulan muchos jóvenes que sienten el llamado de Dios al sacerdocio en especial a ser un sacerdote diocesano, los espacios del Seminario Mayor en la web buscan responder a todas estas preguntas de tal forma que sean espacios de ayuda para muchos jóvenes que escuchan el llamando. 

2. El seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa por su naturaleza es un Seminario interdiocesano por lo tanto forma a seminaristas de 8 de las 9 diócesis de nuestro país, en su dimensión pastoral (una de las cuatro dimensiones de formación) existen equipos de seminaristas que conforman la pastoral vocacional de cada diócesis, dichos equipos  tienen como principal objetivo acompañar en su  proceso de discernimiento a los jóvenes que sienten el llamado al sacerdocio, en especial al carisma diocesano. Los espacios en la web del seminario buscan dar apoyo a los equipos de pastoral vocacional brindando elementos digitales (vídeos, presentaciones PPT, documentación etc.) para que su pastoral sea mas dinámica y de esta forma poder captar la atención de los jóvenes en su proceso de discernimiento. 

3. La comunidad formativa de nuestro seminario carece de una página web en donde puedan obtener su historial académico, donde puedan consultar las evaluaciones de cada parcial, donde encuentren los horarios de su  clases semanalmente. Los nuevos espacios en la web de nuestro seminario responde a estas necesidades, la integración de una base de datos protegida con contraseñas de usuarios para cada miembro de la comunidad formativa ayudará a realizar una renovación en la dimensión académica de este casa formativa. 

4. Dar a conocer nuestro Seminario al mundo entero mediante los espacios en la web. 

5. La formación de los seminaristas del Seminario Mayor es un esfuerzo en conjunto que realiza el clero y los laicos en sus diócesis, constantemente nuestro Seminario necesita el apoyo económico de todas las diócesis del país y de todos sus fieles laicos, para ello hay todo un sistema de recolección monetaria. Nuestra página web brinda los contactos necesarios para que cualquier persona interesada en apoyar esta Magna obra pueda hacernos llegar  sus donaciones.

Esperamos poder desarrollar una verdadera herramienta de apoyo para la comunidad formativa de nuestro Seminario.  









viernes, 18 de septiembre de 2015

Historia de la presencia de las hnas. de la Sangrada Familia en el SMNSS

LAS HERMANAS de la sagrada Familia en el SMNSS, un testimonio de fe y servicio

Esta foto, tomada en los inicios de la presencia de las Hnas de la Sagrada Familia, registra los comienzas de esta presencia misionera en el SMNSS:  De izquierda a derecha: Sor Cecilia Lachance, Sor Isabel Cerrato, Sor Elodia Michaud, Sor Clara Bergeron, Sor Rita Melanson, Sor Maria Clara

Hacia el año 1960, la Iglesia de Roma pide a todas las Congregaciones religiosas, aún no misioneras, y al clero diocesano de ir a evangelizar a América Latina. Contestando al gran deseo expresado por el Papa Juan XXIII, el Episcopado canadiense asume, con el acuerdo del Arzobispo de Tegucigalpa, la construcción, la fundación y la dirección del Seminario Mayor Nuestro Señora de Suyapa para la formación sacerdotal en América Central.

Después de un tiempo de formación en México, cinco sacerdotes de diversas Diócesis de Canadá levantan el vuelo a Honduras. En 1961, son los preparativos de la construcción del Seminario Mayor. Mons. Gerardo Cambrón, de la Diócesis de Sherbrooke, Quebec, Canadá será el primer superior. Este último requiere de los servicios de las pequeñas hermanas de la Sagrada Familia. Sor Julieta Coté, superiora general y su Consejo aceptan de auxiliar a los sacerdotes en su trabajo de evangelización. Ellas nombran a las hermanas: Santa Magdalena (Cecilia Lachance), San Claudio (Clara Bergeron), Santa Magdalena de la Cruz (Rita Melason), San Gastón (Elodia Michaud). 

Llegan al seminario mayor de Tegucigalpa el cuatro de febrero de 1962
El 15 de octubre de 1961, las cuatro fundadoras al Centro de Cuernavaca, México, por un curso de tres meses del idioma español y de las costumbres de América Central. Llegan al Seminario Mayor de Tegucigalpa el cuatro de febrero de 1962. Mons. Gerardo Cambrón, los sacerdotes y unos veinte seminaristas les acogen a brazos abiertos. La construcción no está terminada para la entrada de los estudiantes y la llegada de las religiosas canadienses. Estas últimas se hospedan en unas habitaciones alquiladas y pequeñas en frente de la Catedral de Tegucigalpa, la capital. Después de una instalación rudimentaria en su nuevo convento, además de asumir las tareas materiales, colaboran en la medida apostólica en la medida de sus posibilidades. Con motivo en las vacaciones en su familia, los seminaristas dan a conocer a las pequeñas hermanas en sus parroquias. En diciembre de 1963, Isabel Cerrato originaria de Yuscarán, el Paraíso, se ha vuelto la primera postulante; en enseguida entra Mirian Ham, originaria de San Pedro Sula. A principios las jóvenes están acogidas en el convento cerca del Seminario Mayor. Aumentando el número, se necesita alquilar otra casa. El 13 de Mayo de 1970, se desplaza el noviciado a la Colonia el Manchen, luego el 13 de diciembre de 1971 a la parroquia de la Inmaculada Concepción, Comayagüela.

Beata Madre Maria Leonia 

En 1973, la construcción de una Casa Central y Noviciado se confirma necesaria. El 19 de Marzo de 1975, la bendición de los pabellones ubicados en la Colonia Miraflores, Tegucigalpa, es presidida por su Excelencia Monseñor Héctor Enriques Santos, Arzobispo de la Diócesis. A su turno las postulantes y novicias fascinadas por el ideal de la Madre María Leonia, atraen a otras jóvenes para sostener el ministerio de los Sacerdotes. Desde la apertura del primer noviciado, las responsables tanto canadienses como hondureñas han dado lo mejor de ellas mismas para la formación inicial: Sor Clara Bergeron desde su llegada a Honduras en 1962 y Sor Juana de Arco Béliveau de 1974 hasta 1991. Después la sucede Sor Rosa Linda Núñez, Sor Julia Corea y Sor Rosa Elena Franco.

Al Seminario de Mayor de Honduras, en 2011, cinco religiosas hondureñas asistidas de laicas, se consagran siempre para los sacerdotes, los profesores y cerca de ciento cincuenta estudiantes en teología y filosofía. También están el arzobispado de Tegucigalpa y en cinco casas cúrales, de esta misma Diócesis. En la Diócesis de Choluteca, las religiosas aseguran los servicios a la residencia Episcopal desde 1987, a la casa cural de la Catedral desde 1988 y al Seminario Menor Pablo VI, desde el 2010. En 2008 tres religiosas vuelven al Seminario Menor Santiago Apóstol de la Diócesis de San Pedro Sula donde la comunidad había obrando antes, de 1992 a 2001.

Desde la apertura del primer noviciado, las responsables tanto canadienses como hondureñas han dado lo mejor de ellas mismas para la formación inicial y muchas hermanas han entregado su vida al servicio del SMNSS. 
Tomado de la revista: Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa 50 años formando sacerdotes según el corazón de Dios.

Historia de los Padres Eudistas en el SMNSS

EL SERVICIO EUDISTA EN LA FORMACIÓN DEL CLERO EN EL SMNSS

Por. Lic. mauricio martínez Fonseca CJM, 2012.


De izquierda a derecha: P. Jose Mario Bacci (Rector), P. Oscar Acevedo (ecónomo), P. Oscar Tulio Londoño, P. Rolando Colorado, P. Enrique Ramirez(Prefecto académico), P. Jhon Alvaro herrera

En nuestro Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa se destaca  la presencia misionera de la Congregación de Jesús y María (Padres Eudistas) en la Iglesia Hondureña. Este año se cumplen ya 21 años  de presencia eudista en este bello país.  El 4 de febrero de 1994 los padres Harold de Jesús Castilla y Rafael Niño dan inicio a la misión eudista en Honduras con la dirección del Curso Propedéutico en las instalaciones del antiguo Seminario San José en Casamata. Después de dos años, en junio de 1996, los padres eudistas asumen también la dirección del Seminario Mayor. Tuvo comienzo así una nueva etapa en la historia dorada de esta Casa de Formación. Concluían 30 años de testimonio misionero y formativo de los Padres de la Sociedad de Misiones Extranjeras de Quebec, los Padres Javerianos. De esta forma, en enero de 1997, la Conferencia Episcopal de Honduras confía a la Congregación de Jesús y María, Provincia de Colombia, la dirección del Seminario Mayor. Asume como Rector del Seminario, el Padre Mario Fernando Hormaza y lo acompaña el Padre Guillermo Acero, Administrador. En el Curso Introductorio continúan su actividad misionera los padres Leonardo Arboleda, Director, y Giovanni Hernández, asesor. En la ceremonia oficial que marcó el inicio de esta fase de la vida del SMNSS estuvieron presentes el entonces Superior General de los eudistas, P. Pedro Drouin, y el entonces Superior Provincial de Colombia, P. Carlos Álvarez.

En 1998, se inician las labores académicas del Curso Introductorio en las nuevas instalaciones (en dónde está ubicado actualmente) bajo la dirección del Padre Juan Fernando Medina Múnera y la colaboración del entonces Lic. José Gregorio Rodríguez. Tal como se dijo, en este año, nosotros, los Eudistas, celebramos 21 años de presencia misionera en la formación presbiteral en Honduras y 18 años de servicio en la dirección del SMNSS. Durante este tiempo, la Congregación de Jesús y María ha ofrecido el concurso de muchos presbíteros, la mayoría de ellos devotos formadores que ofrecieron lo mejor de sí mismos en función del cumplimiento fiel de esta delicada misión que la Iglesia hondureña ha puesto en sus manos; desde 1997 la Congregación ha asumido con responsabilidad cada una de las exigencias que la dinámica del proceso formativo implica: el servicio de la coordinación de la actividad formativa que garantiza la buena marcha del proceso y la unidad de criterios en el desempeño de las diversas decisiones dentro del mismo proceso (la rectoría); la exigente labor de mantenimiento, organización de la casa y relación con colaboradores y empleados (la administración), la estructuración de los planes de estudio, la relación con los profesores y con las entidades que rigen la educación superior en el país  para asegurar la buena marcha de esta importante dimensión formativa (la prefectura académica), el seguimiento de la actividad pastoral de los seminaristas y la continua reflexión en torno a la formación de los futuros pastores de modo que adquieran los trazos del corazón pastoral de Jesús (la animación pastoral), el acompañamiento humano y espiritual de los seminaristas en los grupos de vida (los respectivos cursos) y los grupos de Diócesis.

El primero de julio de 1998, el Padre Hermes Amaya es nombrado Rector del SMNSS y ejerce su misión hasta el 31 de julio del 2001. En el 2002, el padre Gustavo Londoño Muñoz asume la rectoría hasta el año 2007. En el 2008 llegará el P Jaime Rojas quien asume también la rectoría y sirve en la Iglesia hondureña hasta el año 2011. La labor formativa, sin embargo, no depende de una sola persona, sino que es fruto de la interacción entre los miembros del Consejo de Formación integrado por el rector, el vice-rector y los demás formadores. De manera que, es justo también aludir, a la presencia de algunos presbíteros eudistas –entre tantos otros- que han servido en el SMNSS durante los últimos 18 años de existencia de esta casa formativa: el P. Juan Fernando Me- dina, ha contribuido eficazmente a la formación de los jóvenes candidatos al presbiterado durante dos períodos (1998-2002 y 2009 hasta 2014); el P. José Gregorio Rodríguez  que sirvió en el Seminario durante 10 fecundos años de actividad apostólica (1998 - 2008); el P. Oscar Echeverri, Administrador de la casa durante 9 años. Su labor está llena de desafíos pero su acertada conducción ha permitido que la Casa luzca bella y digna, y sea ambiente saludable para la vida formativa. 

Hoy el Consejo de Formación está integrado por los PP. José Mario Bacci Trespalacios, rector (desde febrero del 2012); Oscar Acevedo Administrador; Enrique Ramirez, Prefecto Académico; Oscar Londoño, animador de la Dimensión Pastoral; Jhon Alvaro herrera y Rolando Colorado. Como ha sucedido en otras ocasiones, algunos padres diocesanos han hecho parte del Consejo de Formación.

¿Qué significado tiene para los padres eudistas servir a la iglesia hondureña durante estos 18 años en la dirección del SMNSS?
Después de todo este tiempo, puedo decir con sinceridad que la experiencia de cada Eudista en esta casa ha sido caracterizada por el sentido de fraternidad, por la acogida sencilla y por las relaciones cordiales. Abiertos a darnos la oportunidad de servir desde nuestro carisma propio, hemos vivido juntos para la misión, tal como rezan nuestras Constituciones.  Cada uno de los Obispos de esta Iglesia Hondureña nos ha manifestado siempre su gratitud y su apoyo. En general, los sacerdotes de las diversas Diócesis nos han expresado su respeto y  su eficaz colaboración.

Las religiosas de la Sagrada Familia nos han ayudado con su entrega y sencillez en esta significativa tarea de la formación de pastores según el Corazón de Dios. Los seminaristas que han pasado por esta casa nos han mostrado, en la vida cotidiana, su admiración y cariño. Han sido muchos los jóvenes que han pasado por esta casa y nos han dado su confianza para colaborar con la realización de su proyecto existencial: la configuración con Cristo Sacerdote, Maestro y Pastor. Hemos caminado con ellos buscando ser verdaderos pastores al servicio del pueblo de Dios en las diversas expresiones de la cultura catracha, tan rica, tan propia, tan bendecida por Dios. Nos han dado la oportunidad de compartir el patrimonio espiritual, apostólico, eclesial y sacerdotal que hemos recibido de san Juan Eudes, gran misionero y formador de la Francia del S.XVII,  Su manera sencilla, eficaz, espiritual de captar el misterio del amor de Dios lo llevó a consumirse en la misión (en su vida realizó más de 114 misiones) y en la formación (fundó Seminarios e influyó en la formación de los sacerdotes que, a su vez, contribuyeron al crecimiento de la Iglesia francesa).

Creo que estos 18 años en el SMNSS representan para nosotros mucho crecimiento a nivel personal, ministerial y comunitario. Además de dar lo que tenemos, nuestro patrimonio espiritual y misionero en la CJM, hemos recibido el ciento por uno y también la vida eterna (Cf. Mt 19,29). Dios bendiga nuestra presencia y misión en esta Iglesia de Honduras; que podamos tener muchos más ex alumnos presbíteros que trabajen por el bien de sus respectivas Diócesis y de la Iglesia, siempre en comunión fraterna con sus obispos y en profunda unidad presbiteral.

Tomado de la revista: Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa 50 años formando sacerdotes según el corazón de Dios


Historia de los Padres Javerianos en el SMNSS

La presencia de los PADRES JAVERIANOS en el SMNSS

Por Mons. Guido Charbononneaux, Obispo de la Diócesis de Choluteca, miembro de los Sacerdotes de las Misiones Extranjeras de Quebec, rector del SMNSS de 1987-1991


Nuestra presencia en el Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa se sitúa en continuidad con la obra de la formación sacerdotal en Honduras.  No hemos sido los fundadores del Seminario. Éste había sido fundado el 24 de enero de 1961, mediante un contrato entre la Conferencia Episcopal de Honduras (C.E.H.) y la Conferencia Episcopal Católica Canadiense (CECC).  En dicho contrato el Art. 1-b estipulaba: La C.E.H. entrega la dirección y administración del S.M.N.S.S. al Rector y a su Consejo, compuesto de sacerdotes canadienses y gradualmente también de sacerdotes hondureños.  Además el Art. 6-a decía claramente: Con la aprobación de los Ordinarios propios, el Rector podrá sumar al personal del Seminario sacerdotes hondureños, especialmente preparados, para el ministerio de la formación sacerdotal.

Ha sido siempre una preocupación nuestra como Javerianos: propiciar la formación superior de unos sacerdotes hondureños para que trabajen como formadores o profesores en el Seminario. El Seminario Mayor empezó a funcionar en 1962, bajo la dirección de Mons. Gerardo Cambron y otros tres sacerdotes diocesanos canadienses, con la ayuda de dos Javerianos.  En 1965, el P. Rogelio Laniel asumió la rectoría.  A finales de 1965, el entonces Nuncio Apostólico en Honduras, Mons. Sante Portalupi, manifestó lo siguiente en una carta al P. Gilles Ouellet, Superior general de la Sociedad: Los Obispos de Honduras estarían agradecidos si vuestra Sociedad tomara a su cargo la dirección y la enseñanza en el Seminario Mayor.  Y le pedía que pensara en el nombramiento de un Rector.  El P. Ouellet le contestó que estaba en principio de acuerdo y esperaba visitarlo pronto para hablar del asunto.  A partir del 2º semestre de 1966., el P. Guillermo Aubuchon asumió la rectoría del Seminario, hasta 1973.

P. Roberto Nolin, miembro de los Sacerdotes de las Misiones Extranjeras de Quebec, rector del SMNSS de 1981-1986.

Los demás Rectores Javerianos fueron los Padres Guido Soucy  (1974-1976), Guido Plante (1977-1980;  1992-1996), Roberto Nolín (1981-1986) y Guido Charbonneau (1987-1991).  Por todo, 22 Javerianos trabajaron en el Seminario, asistidos por 10 sacerdotes asociados.  12 sacerdotes hondureños han trabajado como formadores o profesores externos durante nuestros 30 años de presencia en el Seminario.  Entre 1962 y 1996 entraron 616 seminaristas, de los cuales 490 procedían de una diócesis de Honduras, 98 pertenecían a una diócesis de otro país (Guatemala, Nicaragua, Panamá, Belice y El Salvador) y 28 eran de congregaciones religiosas. Las orientaciones que hemos seguido en la formación de los sacerdotes en el Seminario han sido las líneas indicadas por la Iglesia: el Concilio Vaticano II, el CELAM (Medellín, Puebla y Santo Domingo), los Papas (Por ej. Evangelii Nuntiandi, Pastores Dabo Vobis, Redemptoris Missio).  Siempre hemos querido formar pastores a imagen de Cristo Buen Pastor. También nos hemos dado cuenta de la situación crítica de los sacerdotes diocesanos, muchas veces aislados geográficamente.
Los PP. Guido Soucy y Andrés Dumas, también PP Javerianos, que colaboraron en la formación de los sacerdotes en el SMNSS. El P. Soucy fue rector de 1.974-197







Tomado de la revista: Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa 50 años formando sacerdotes según el corazón de Dios

Misión y Naturaleza de nuestro Seminario

Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa (SMNSS)
MISIÓN Y NATURALEZA

El SMNSS, como institución fundada por la Conferencia Episcopal de Honduras con fines estrictamente pastorales, es, por su naturaleza, una institución de carácter interdiocesano que reúne a los jóvenes vocacionados en una comunidad educativa, humana, académica y eclesial, a la cual se le confía la tarea de formar a los futuros presbíteros del país, según las orientaciones de la Iglesia Católica y para responder a los retos que plantea la sociedad de hoy.

En uno de los más importantes documentos del Magisterio Pontificio acerca de la formación sacerdotal, “Os daré pastores” (en su nombre latino es Pastores davo vobis), el Papa Juan Pablo II define el Seminario  Mayor  como comunidad educativa en camino. El Seminario es la comunidad promovida por el Obispo para ofrecer a quien es llamado por el Señor para el servicio apostólico, la posibilidad de vivir la experiencia formativa que el Señor dedicó a los Doce (Cf. PDV, 60).  Su identidad más profunda, entonces, radica en “ser a su manera continuidad en la Iglesia de la íntima comunidad apostólica formada en torno a Jesús” (Cf. PDV, 60).

Vista aérea de las instalaciones del Seminario 
El Seminario Mayor es comunidad educativa en camino y ofrece a quien es llamado por el señor para el servicio apostólico, la posibilidad de vivir la experiencia formativa que el señor dedico a los doce (Cf. “Os daré pastores”, 60 – Papa Juan Pablo II). Así, pues, el Seminario tiene su retente en la primera comunidad de los Doce Apóstoles quienes en el seguimiento de Señor, aprendieron del maestro y disponiéndose a recibir en Pentecostés el don del Espíritu Santo, fueron convocados para estar con el, y para ser enviados a evangelizar (Cf. Mac 3, 13 - 16) “El anuncio del Evangelio hoy” (Evangelii Nuntiandi), 14)

 1. Se trata, en primer lugar, de una- comunidad humana en la cual los distintos miembros tienen como horizonte la educación de personas llamadas a formar una comunidad familiar que vive con gozo la presencia, la palabra y el amor de Cristo resucitado. Se trata de un proceso de peregrinación hacia el misterio que cada uno es para sí mismo, en el que no puede faltar el ahondar en la propia biografía personal.

 2. El Seminario es una comunidad eclesial: es una comunidad de creyentes y discípulos de Jesús vinculados por la Liturgia, la misma fe, la experiencia fraternal del mismo amor, el Evangelio, el Espíritu de Cristo y el amor a la Iglesia. Comunidad abierta, solidaria y servicial.
Seminaristas de la Arquidiocesis de Tegucigalpa con su Obispo auxiliar Mons. Juan Jose Pineda Fasquelle 
3. Como comunidad diocesana, el Seminario vive en comunión con el Obispo y el Presbiterio. Conocer de cerca las preocupaciones pastorales de la Diócesis y participar de sus esperanzas e inquietudes es una tarea vinculante e integradora. 

4. En cuanto comunidad educativa el Seminario Mayor acompaña el discernimiento vocacional y ofrece así una ayuda eficaz a cada joven para que se integre en modo eficiente al proceso formativo a nivel humano, espiritual, intelectual y pastoral en contexto de vida comunitaria.

Grupo de seminaristas preparándose para servir en la liturgia de Semana Santa
5. Como comunidad educativa en camino se organiza a partir de cuatro dimensiones: humano-afectiva, espiritual, intelectual y pastoral. Atendiendo a lo humano-afectivo, procuramos el acompañamiento personalizado, utilizando las herramientas necesarias para consolidar la madurez que permita al joven candidato vivir plenamente y afrontar oportunamente las diversas situaciones de crecimiento y de madurez personal y los momentos conflictivos que marcan el largo proceso formativo y que continuarán presentes, en formas diversas, en la futura vida ministerial. Desde la vida espiritual formamos hombres abiertos a Dios, dóciles a la moción del Espíritu, atentos a su Palabra, obedientes y capaces de amar y servir; hombres que son capaces de celebrar la propia fe y alimentarla con una participación activa, consciente y fructuosa en los Sacramentos, especialmente en la Eucaristía, celebrada diariamente y asumida como origen y culmen de la vida de la fe; y la Reconciliación, celebrado con la regularidad del propio camino de fe y de santidad.

Desde la perspectiva intelectual forjamos en los estudiantes el gusto por la sabiduría y sus diversas formas de expresión; cultivamos en ellos el afán del conocimiento, la avidez por la investigación y el interés profundo por la construcción de una actitud intelectual necesaria para suscitar el diálogo fecundo fe-contexto general; y se suscita también en todos el desarrollo de la propia capacidad de análisis de la realidad a partir de la reflexión filosófica y el saber teológico. Desde la experiencia pastoral, el candidato desarrolla la capacidad de generar, acompañar e identificar procesos de fe en las comunidades y grupos de los cuales es responsable. El fin último del Seminario es formar verdaderos pastores según el Corazón de Dios.


Tomado de la revista: Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa 50 años formando sacerdotes según el corazón de Dios

Bosquejo Histórico

Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa

Bosquejo Histórico

Por P. Juan Ángel López,
Arquidiócesis de Tegucigalpa
alumno del SMNSS(1990-1995)
Licenciado en Historia Eclesiástica en la Pontificia Universidad Gregoriana (Roma, 2002)
Doctorando en Historia Eclesiástica en la Pontificia Universidad Gregoriana (Roma)


La historia de la Iglesia en Honduras es, de suyo, sumamente compleja y eso se refleja, de manera particular, en la configuración, tan difícil, de un clero nativo o de un clero diocesano.
No podemos negar que el mayor peso de la evangelización de nuestra patria recayó primaria y fundamentalmente sobre los hombros de los religiosos, concretamente los franciscanos y los mercedarios.Desde los primeros pasos de la presencia evangelizadora en el país, pero sobre todo con la llegada del primer obispo al país, una preocupación constante ha sido la de responder a las necesidades pastorales de la región, gobernación, Intendencia o República. 

Los sacerdotes siempre fueron escasos y actualmente, el panorama no es muy diverso. Los primeros diocesanos, en todo el sentido de la palabra, fueron aquellos  4 clérigos provenientes de España  que acompañaron al primer obispo en Honduras, don Cristóbal de Pedraza. A estos se les sumaron otros 4 más, “reclutados” en la Isla de la Española (Santo Domingo). Al llegar a Honduras se encuentra con 7 sacerdotes que en nuestro país ya realizaban alguna labor espiritual, aunque tenían más de aventureros que de sacerdotes. Entre ellos cabe destacar al P. Juan Habela que será amplia mente citado en las crónicas de la época y que prestaba su servicio en el puerto de Trujillo.

Todo esto ocurría en 1545. Pero apenas 5 años después, tan sólo quedan 7 sacerdotes y apena 3 frailes mercedarios. Todo esto debido a la incapacidad de los poblados para sostener a los sacerdotes, lo que obliga a algunos de ellos a dejar la misión.Con la llegada definitiva de los mercedarios en 1550 y de los franciscanos en 1572, la Iglesia hondureña se inclinará por más de un siglo a privilegiar la obra de los religiosos.Con todo, tanto Jerónimo de Corella como Alonso de la Cerda (Segundo y tercer obispo de Honduras) se preocuparán por fomentar una formación mínima, con una cátedra de gramática, con la intención de que esta se tornase con el paso del tiempo en el primer seminario del país: el Colegio Tridentino. El mayor peso de la evangelización de nuestra patria recayó primaria y fundamentalmente sobre los hombros de los religiosos, concretamente los franciscanos y los mercedarios.
Colegio Tridentino en Comayagua, Honduras

Ya para finales del S. XVI hay testimonios de vocaciones surgidas entre los criollos (hijos de españoles nacidos en América) aunque sus rudimentos académicos los adquieren en aquella
“escuelita” episcopal. Tienen que salir hacia Guatemala a concluir sus estudios por lo que una
buena cantidad de ellos se quedará fuera y no retornará al país. Juan Modesto Merlo de la Fuente, ya en 1660, proyecta establecer un Seminario.

Frente a esta dificultad reaccionará el primer obispo diocesano de origen medio indígena: Juan Modesto Merlo de la Fuente quien, para 1660, proyecta establecer un Seminario. No verá la luz este Seminario bajo los ojos de Merlo de la Fuente sino de Alonso Vargas y Abarca que lo fundará en octubre de 1679. En 1826 se cerró el Seminario por falta de personal y sobre todo por la ausencia de un obispo que dirigiese el destino de la Diócesis, en general.

Mons. Manuel Velez intentó reabrir el Seminario en Comayagua; luego ideó el proyecto de una casa de Formación en Siguatepeque, pero la situación del país no permitía que se sostuviese de manera independiente; y el hecho de necesitar del apoyo del gobierno, obstaculizaba grande-
mente su mera existencia. En 1905 Mons. José Martínez y Cabañas lo abre nuevamente y dos años más tarde el Seminario es trasladado a Tegucigalpa, por la situación de inseguridad que se vivía en Comayagua.


Para 1909, llegan los primeros padres Lazaristas, y ellos asumirán la dirección del Seminario, de tal manera que hasta 1933 el Seminario cambia de nombre: “Seminario San Vicente”. En 1933 Mons. Hombach, segundo arzobispo de Tegucigalpa y antiguo Rector del Seminario, construyó el Seminario en el sector de Casamata con el nombre de “Seminario San José”. Por escasez de fondos, de personal y por recomendación de la Santa Sede, el edificio en sí mismo, albergaba el Seminario Mayor y el Seminario Menor.

En 1933 Mons. Hombach, segundo arzobispo de Tegucigalpa y antiguo Rector del Seminario, construyó el Seminario en el sector de Casamata con el nombre de “Seminario San José”

Los Padres Lazaristas dejarán la dirección del Seminario prácticamente a la muerte de Mons. Hombach, por lo que en Marzo de 1945, los Padres Salesianos asumen la dirección del Seminario a petición del obispo auxiliar y futuro Arzobispo, Mons. José de la Cruz Turcios Barahona. Pero, lamentablemente el Seminario sólo podía servirlos primeros años de la formación sacerdotal, y no será sino hasta 1950, cuando el Seminario comienza con un plan de estudio de tres años.
Para el 16 de abril de 1953, la Conferencia Episcopal de Honduras erige oficialmente el Seminario “San José” como Seminario Nacional de Honduras, bajo el impulso y el requerimiento directo dela Santa Sede que le reconoce ese mismo año.

Padres Javerianos Celebrando sus 50 anos de presencia evangelizadora en el sur de nuestro país 

El Seminario funcionaba con mucha dificultad es por eso que la Conferencia Episcopal consideró encomendarlo a sacerdotes venidos del Canadá que desde 1955 se encuentran presentes sobre todo en el sur de Honduras




Monseñor Héctor Enrique Santos, como Presidente de la Conferencia Episcopal, dispone la fundación de un Seminario Mayor interdiocesano para alumnos de filosofía y teología, Es así que se firma un convenio con la Conferencia Episcopal del Canadá que se compromete a construir el Seminario y proveerlo con los formadores necesarios. De esa manera, en el lugar donde funcionaban juntos los Seminarios en Casamata, se destinará el espacio sólo para el Seminario Menor y bajo la conducción de los Padres Salesianos; mientras que el Seminario Mayor se traslada a un terreno comprado para tal propósito junto al río Guacerique, en la zona conocida como Los Laureles y teniendo una salida junto a la calle que conduce a Lepaterique.


De tal manera que para el segundo semestre de 1962 nace el Seminario Mayor, con un nuevo nombre: “Nuestra Señora de Suyapa” y con carácter interdiocesano. En Junio de 1966, los Padres de las Misiones Extranjeras de Quebec ( Javerianos), contando siempre con el auxilio de algún sacerdote hondureño, asumen la responsabilidad de guiar la formación de los futuros sacerdotes en Honduras, hasta 1996.  En 1997 la Conferencia Episcopal de Honduras confía la dirección del Seminario Mayor a la Provincia Colombiana de los Padres Eudistas;  y en manos de dicho Instituto permanece hasta el presente.
San Juan Eudes  fundador de la Congregación de Jesús y María (Eudistas)

Tomado de la revista: Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa 50 años formando sacerdotes según el corazón de Dios


 

Puedes apoyar al seminario con tus aportaciones

El SMNSS se sostiene gracias al apoyo de muchos benefactores y amigos de ésta magna obra. Ellos ofrecen su contribución para que los jóvenes llamados al sacerdocio puedan realizar su sueno de ser pastores según el corazón de Dios.

En alguna ocasión, S. Juan Pablo II dijo: "Que ninguna vocación se pierda por falta de dinero". También en Honduras necesitamos el apoyo de toda la comunidad católica para que todos nuestros seminaristas puedan vivir el camino formativo necesario para llegar a ser sacerdotes al servicio del pueblo de Dios.

NUESTRO PROYECTO DEBE CONTINUAR SIEMPRE ADELANTE:

Cuentas bancarias disponibles:
BAC/HONDURAS Cta. No. 100474656
BANCAHFE Cta. No. 1701008540
BANCO DE OCCIDENTE Cta. No. 11-401-015279-9
A nombre: Seminario Mayor Nuestra Senora de Suyapa - Amigos del Seminario.

También puedes preguntar por los talonarios de aportaciones en estos teléfonos: Rectoría 2234 6616 , 2234 6620 , 2234 4730 , 2233 2459, Fax 2234 6612

P. Mario Bacchi Trespalacios, Rector del SMNSS


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